Si recordamos Rancagua y su región hace 20 años, nos encontramos con una importante región del país donde no había músicos profesionales y escucharles era poco común, pero si hubo ilustres personajes que motivaron a que se siguiera insistiendo en crear una instancia musical con carácter regional, lamentablemente muchos de estos amigos no están hoy con nosotros y a quienes debemos agradecer hoy en sus nombres este proyecto, ellos confiaban en su realización, que durante mucho tiempo fue un sueño, Hoy pienso y espero que con el proyecto MUSICA ANTIGUA NUEVO MUNDO, aportemos en algo para que la realidad cultural y artística de nuestra región, ciudad y país sea distinta.
A la vez el arte es mucho más que estructuras artísticas, son modelos de vida y vida social, donde la armonía, el ritmo, es uno solo, en animo de perfección y afán de excelencia, en una rigurosa disciplina de articulaciones y coordinaciones, para buscar la armónica interdependencias entre movimientos, voces e instrumentos, esto se produce en este Nuevo Mundo, casi como un sueño del que aun no despierto, este lugar será un lugar donde se vinculan y promueven estos valores éticos y estéticos vinculados al arte, de ahí su enorme utilidad en cuanto se refiere a un espacio de encuentro de la sensibilidad y muestra de la forja de los artistas por rescatar el patrimonio de la humanidad.
Este proyecto es para todos más que un privilegio, un desafió, a medida que se vayan realizando, debemos pensar en las características de nuestra comunidad y prepararnos a una transformación cultural profunda, ya que el arte que aquí se desarrollará se constituirá en fuente de desarrollo de las dimensiones emocionales de nuestro público, que eleva su espíritu y le conduce a un desarrollo integral de su personalidad, de tal manera que este proyecto sea una inmensa ganancia intelectual y afectiva, de aporte individual para el logro de inmensos fines colectivos lo que conduce a un desarrollo del autoconcepto como habitantes de ciudad, como región y replicable a otras provincias de Chile y nuestro continente.
Además creo que este cambio proyectará en los niños y jóvenes con interés artístico, un espíritu de superación, al ver artistas se proyectarán con una identidad noble, en un espacio creador y difusor de cultura, fuente de intercambio de nuevas ideas del arte, excluyéndolas como lujo y lo que convertirá a este espacio como patrimonio de esta joven sociedad.
Aspiramos que Nuevo Mundo, contribuya a la construcción de esta nueva era cultural en nuestra región, en que nosotros artistas y nuestro arte se debe poner al servicio de la sociedad y así lograr la exaltación de los valores más dignos del ser humano a través del patrimonio de nuestra humanidad.
Marcelo Vidal